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CDMX 29/08/23. Durante el conversatorio “Experiencias del exilio: memoria y solidaridad de México” a 50 años del golpe de Estado en Chile, legisladores y funcionarios coincidieron en que México destacó entre la comunidad internacional por el apoyo y solidaridad que brindó a miles de exiliados, que se refugiaron en nuestro país durante casi dos décadas.
En dicho evento se remarcó el cálido recibimiento mexicano y que el país suspendiera relaciones con Chile hasta el restablecimiento de la democracia, por este motivo muchos chilenos consideren a México como una “segunda patria”.
Isabel Allende Bussi (Senadora chilena) recordó que su padre (Dr. Salvador Allende) tuvo una relación muy cercana con México, pues en 1972 fue recibido en el Senado de la República, para refrendar los lazos de amistad entre ambas naciones, además de que intercambió cartas con el general Lázaro Cárdenas, con quien compartía los ideales de justicia social y la determinación de nacionalizar riquezas naturales.
Reiteró que de toda la ayuda internacional que Chile recibió, México sobresalió por su solidaridad con quienes sufrieron la brutalidad del golpe militar: “tengo que reconocer que no solo nos abrió las puertas, sino que nos recibió con calidez y fraternidad que siempre le ha caracterizado”.
Por su parte, el senador chileno Miguel Insulza lamentó que, durante la dictadura, el régimen de Augusto Pinochet no tuvo compasión ni consideración, pues fueron asesinados por igual hombres y mujeres, la mayoría de ellos, jóvenes. También, celebró que existan iniciativas por parte del actual presidente de Chile, Gabriel Boric, para reactivar la búsqueda de desaparecidos durante aquel régimen militar.
El presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores, Héctor Vasconcelos, subrayó que Salvador Allende, fallecido en el golpe de Estado del 11 de septiembre de 1973, es una figura toral en la historia de Latinoamérica, pues intentó transformar la sociedad conservadora chilena de la época en una moderna, igualitaria y libre de pobreza. Su lucha y convicción le costó la vida en el asalto al Palacio de la Moneda, lo cual conmocionó a todas las conciencias progresistas del continente.
Durante el conversatorio, el senador José Narro Céspedes dijo que la tradición de asilo en México comenzó en 1853, cuando se firmó, junto a Colombia, un tratado de no extradición por delitos políticos, lo que reafirmó la postura de México en ser un país solidario con las causas de los hombres y mujeres del mundo que luchan por la libertad y la democracia.
Además, celebró la decisión de la Corte Suprema Chilena de condenar de forma definitiva a siete exmilitares, como autores del secuestro calificado y homicidio del cantautor Víctor Jara, quien fue asesinado en el estadio de Chile junto a cinco mil partidarios del Salvador Allende.
La senadora Beatriz Paredes, ante hechos como los ocurridos en 1973 subrayó que es esencial levantar la voz cuando haya señales de autoritarismo y más cuando se pongan en peligro los procesos de revolución, democracia y respeto a los derechos humanos.
“El mutismo en materia de derechos humanos nos lo cobra muy caro la historia”, sostuvo la presidenta de la Comisión de Relaciones Exteriores América Latina y el Caribe, quien celebró la determinación de Gonzalo Martínez Corbalá, embajador de México en Chile durante el golpe militar, pues dio asilo a más de 800 chilenos en la embajada.
Finalmente, Gustavo Madero Muñoz, del Grupo Plural, deseó que nunca más ocurran hechos como la dictadura militar chilena, aunque advirtió que hoy en el mundo hay reflejos autoritarios y los populismos dictatoriales amenazan a las democracias, por eso se sumó al llamado a cuidar la democracia latinoamericana, la pluralidad, el respeto, la tolerancia y sobre todo los derechos humanos frente a la militarización.
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